"Para nosotros, ella fue simplemente la mejor madre del mundo", dijo Harry

Londres.- En el décimo aniversario de la muerte de la princesa Diana de Gales, admiradores procedentes de todo el mundo, se reunieron ayer en Londres para participar en el homenaje a la ex esposa del príncipe Carlos.
Frente al palacio de Kensington, antigua residencia de la "Princesa del Pueblo", sus seguidores dejaron una enorme cantidad de ramos de flores, y cientos de tarjetas, fotos, banderas y pósters. En los jardines del palacio se realizó una misa de carácter popular para recordar a la princesa. "Adoramos a Diana y hacemos lo posible por que no sea olvidada", afirmó Evelyn Marie Seidel, presidenta del Club en Memoria de Lady Di, de Alemania.

Por televisión
En tanto, la familia real y unos 500 invitados participaron en una ceremonia, que incluyó una misa en la Capilla de la Guardia real, cerca del palacio de Buckingham. El acto fue trasmitido por televisión, en directo, a todo el mundo.
"Para nosotros, tan sólo dos hijos cariñosos, ella fue simplemente la mejor madre del mundo. Hoy queremos recordarla como ella hubiera deseado", dijo Harry, de 22 años, el hijo menor de Carlos y Diana, durante la ceremonia.
"William (de 25 años) y yo podemos dividir la vida en dos partes: esos años en los que fuimos bendecidos con la presencia física de nuestra madre y de nuestro padre, y los 10 años desde la muerte de nuestra madre", prosiguió Harry, quien vistió un traje oscuro y una corbata militar.
El príncipe llamó a su madre "guardiana, amiga y protectora", y dijo que siempre será recordada "por su impresionante actividad a favor de los enfermos y desfavorecidos".
A la misa, que comenzó al mediodía y duró una hora, asistieron también la reina Isabel II y su marido, el príncipe Felipe; el príncipe Carlos de Gales, heredero del trono y ex marido de Diana; el primer ministro británico, Gordon Brow; sus predecesores Tony Blair y John Major; y sir Elton John, el famoso músico y gran amigo de Lady Di.
Camilla, la actual esposa de Carlos y su amante por casi 30 años, no asistió a la ceremonia. La mujer a la que Diana acusó de haber roto su matrimonio había sido invitada por su marido, pero optó por evitar posibles polémicas con su presencia.
El magnate egipcio Mohamed al Fayed, quien acusa al príncipe Felipe de haber urdido un plan para asesinar a Diana y a su hijo Dodi Fayed, novio de la princesa, tampoco estaba en la lista de invitados. No obstante, Al Fayed recordó a Diana y a su hijo con dos minutos de silencio en Harrods, la famosa tienda londinense, que es de su propiedad, y en la que hay un altar en honor a la pareja.
En la capital francesa, en tanto, seguidores de Diana depositaron ofrendas florales en el túnel del Puente del Alma donde ocurrió el accidente que segó la vida de la princesa, a los 36 años. (DPA-Télam)