05 Febrero 2005
EL PARAPETO DE LA DISCORDIA. Defensa Civil pidió que se reemplace este alambrado por una pared de 1,40 metro de alto.
Sólo 15 minutos había durado la recorrida. La calma matutina del barrio El Bosque les abría las puertas a los inspectores que visitaban el estadio de Central Norte, en el marco de la supervisión de los 50 estadios que tiene el fútbol tucumano. Pasadas las 10, el especialista de Defensa Civil, Carlos López, comenzó con la rutina. Mientras, su asistente técnico, José Contreras, tomaba nota de los aspectos por corregir. Carpeta y lapicera en mano, Contreras anotaba las falencias del alambrado olímpico y la división de los accesos para los hinchas. No había nada fuera de lo normal. Hasta que los supervisores notaron la falta de un parapeto en la tribuna visitante. "Hay que construir una pared de 1,40 metro en vez del alambrado", le indicó López a Angel Zamoratte, vicepresidente de la Liga y hombre fuerte del "cuervo".
A Zamoratte no le gustó nada la orden y argumentó que la construcción del parapeto impediría la visión de parte del público. "Es el reglamento de AFA y tiene que cumplirlo", respondió López. "Estamos en Tucumán, no en la AFA", retrucó Zamoratte.
La discusión empezó a subir de tono; no llegaron a los forcejeos, pero el ingeniero López se retiró del lugar, enojado. "Al final, sólo vengo a cumplir con mi trabajo; no tengo por qué soportar que alguien me trate mal", expresó la autoridad a viva voz.
Sin ocultar su indignación, López -acompañado por Contreras y por el jefe de seguridad deportiva, subcomisario Miguel Bustamante- se subió a un auto rumbo a Casa de Gobierno, mientras que Julio Luna (presidente de la Liga) y Amancio Petray (secretario de la entidad) querían calmar las aguas y que regresaran a realizar los controles. "Sabemos que la gente de Defensa Civil hace su trabajo y son hombres de bien. No había necesidad de las palabras en caliente que se dijeron. Por eso fuimos a dar la cara y pedimos disculpas. Nuestro objetivo es brindar seguridad en los estadios", expresó Luna. "En lo que respecta puntualmente a la supervisión del estadio de Central Norte, quedará inconclusa hasta nuevo aviso", agregó.
En vano
Las disculpas de Luna, de Petray, del vocal Vicente Nicastro y del miembro del tribunal de disciplina Juan Jesús Gómez llegaron tarde. En vano fue el pedido de perdón oficial ante el director de Defensa Civil, el ingeniero Fernando Torres. Sucede que las autoridades que se encargan de controlar la seguridad que tienen los estadios locales ya habían realizado la denuncia ante el Ministerio de Seguridad Ciudadana. Que conste en actas.
A Zamoratte no le gustó nada la orden y argumentó que la construcción del parapeto impediría la visión de parte del público. "Es el reglamento de AFA y tiene que cumplirlo", respondió López. "Estamos en Tucumán, no en la AFA", retrucó Zamoratte.
La discusión empezó a subir de tono; no llegaron a los forcejeos, pero el ingeniero López se retiró del lugar, enojado. "Al final, sólo vengo a cumplir con mi trabajo; no tengo por qué soportar que alguien me trate mal", expresó la autoridad a viva voz.
Sin ocultar su indignación, López -acompañado por Contreras y por el jefe de seguridad deportiva, subcomisario Miguel Bustamante- se subió a un auto rumbo a Casa de Gobierno, mientras que Julio Luna (presidente de la Liga) y Amancio Petray (secretario de la entidad) querían calmar las aguas y que regresaran a realizar los controles. "Sabemos que la gente de Defensa Civil hace su trabajo y son hombres de bien. No había necesidad de las palabras en caliente que se dijeron. Por eso fuimos a dar la cara y pedimos disculpas. Nuestro objetivo es brindar seguridad en los estadios", expresó Luna. "En lo que respecta puntualmente a la supervisión del estadio de Central Norte, quedará inconclusa hasta nuevo aviso", agregó.
En vano
Las disculpas de Luna, de Petray, del vocal Vicente Nicastro y del miembro del tribunal de disciplina Juan Jesús Gómez llegaron tarde. En vano fue el pedido de perdón oficial ante el director de Defensa Civil, el ingeniero Fernando Torres. Sucede que las autoridades que se encargan de controlar la seguridad que tienen los estadios locales ya habían realizado la denuncia ante el Ministerio de Seguridad Ciudadana. Que conste en actas.